La comunidad educativa de la Escuela Territorio Antártico fue testigo de un significativo proyecto de Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP) liderado por los estudiantes del 8vo año Básico A, quienes, durante tres intensas semanas de trabajo, profundizaron en el tema de los derechos humanos y sus aplicaciones en la vida cotidiana. Este proyecto, que involucró asignaturas como Matemáticas e Historia y fue diseñado en respuesta a una necesidad detectada por los docentes: los estudiantes, aunque conocían algunos derechos humanos, no comprendían completamente cómo estos se aplican en el día a día.
Bajo la guía del profesor de Historia, Jonathan Flores; la educadora diferencial, Constanza Olavarría; y la profesora de Matemáticas, Ana Perla Godoy, los estudiantes se embarcaron en un riguroso proceso de investigación. El primer paso consistió en plantear una pregunta general sobre los derechos humanos, que serviría como el eje de todo el proyecto. A partir de allí, los alumnos se encargaron de recolectar datos mediante encuestas a la comunidad escolar, los cuales posteriormente fueron analizados estadísticamente para extraer conclusiones significativas.
Uno de los momentos más destacados del proyecto fue la visita a Villa Grimaldi, un excentro de detención y tortura en Chile. Los estudiantes tuvieron la oportunidad de aprender sobre la historia de los derechos humanos en el país, enfocándose en la importancia de la memoria histórica para evitar que estos crímenes vuelvan a ocurrir. Esta experiencia no solo fortaleció sus conocimientos teóricos, sino que también los acercó emocionalmente a la temática, haciéndoles reflexionar sobre la necesidad de proteger y defender los derechos humanos en la actualidad.
La investigación culminó con la creación de representaciones gráficas de los datos recolectados, que fueron plasmados en afiches atractivos y didácticos. Los estudiantes se sintieron particularmente orgullosos de poder exponer sus resultados no solo a sus compañeros de cursos inferiores, como el 6to básico, sino también a figuras clave del establecimiento, como el director, la jefa de UTP y la inspectora general. Esta exposición les permitió reforzar sus habilidades de comunicación y liderazgo, aspectos que el proyecto fomentó a lo largo de su desarrollo.
Entre los aprendizajes más valiosos que los estudiantes destacaron, se encuentran el profundo conocimiento adquirido sobre los derechos humanos y su capacidad para plantear preguntas de investigación y tomar decisiones basadas en datos. Además, el proyecto les enseñó a discernir entre información verdadera y falsa, una habilidad crítica en la era de la sobreinformación digital. En términos de competencias, los estudiantes también lograron desarrollar habilidades sociales, ya que el proceso de encuestar a la comunidad escolar les permitió interactuar y colaborar con sus compañeros de manera más efectiva.
El trabajo en equipo fue otro pilar esencial en este proyecto. La colaboración entre los estudiantes se vio reflejada en la creación de los afiches y gráficos, donde, además de representar la información de manera clara y visualmente atractiva, también lograron presentar datos complejos de manera accesible para todos los públicos. Esto no solo ayudó a mejorar sus habilidades en matemáticas, al trabajar con gráficos y estadísticas, sino que también los hizo reflexionar sobre la importancia de comunicar ideas de forma efectiva.
El proyecto ABP no solo les permitió a los estudiantes de 8vo A ampliar sus conocimientos, sino que también sirvió para conectar aprendizajes teóricos con experiencias prácticas y emocionales. Al aplicar el ciclo de investigación y hacer uso de habilidades de análisis crítico, los alumnos lograron entender mejor los derechos humanos y cómo estos impactan su vida diaria y la de su comunidad. De esta manera, la Escuela Territorio Antártico reafirma su compromiso con la educación integral, promoviendo proyectos que no solo desarrollan competencias académicas, sino también valores fundamentales para la formación de ciudadanos responsables y conscientes.
Este tipo de proyectos educativos refleja la capacidad de la escuela para adaptar metodologías innovadoras, como el ABP, a las necesidades del entorno escolar, contribuyendo al desarrollo de estudiantes más críticos y comprometidos con su sociedad.